AstraZeneca y la Universidad de Oxford suspenden temporalmente ensayos clínicos en la búsqueda de la vacuna contra covid-19.
La
noticia se hizo a conocer este martes y rápidamente le dio la vuelta al mundo.
Y no es para menos ya que la farmacéutica Sueca AstraZeneca junto al Instituto
Jenner de la Universidad de Oxford en el Reino Unido suspendieron sus ensayos clínicos
en lucha por la elaboración de una vacuna eficiente para combatir el coronavirus.
La
inesperada decisión se debió a que uno de los voluntarios sufrió una reacción adversa
a las pruebas de la potencial vacuna. Según podo conocer el diario estadounidense
The New York Times, uno de los pacientes fue diagnosticado con mielitis
trasversa que es un síndrome inflamatorio poco común que afecta la médula
espinal y podría causar otras infecciones virales.
Actualmente
la vacuna Oxford como se le ha conocido en el mundo está en etapa III. Es decir
que esta siendo probada en masa en varios países y continentes. Entre 18.000 y
30 mil personas de los Estados Unidos, Reino Unidos, América Latina, Asia,
Europa y África están siendo monitoreados para analizar la reacción a la
vacuna.
Michelle
Meixel, portavoz de la farmacéutica ha dicho en un comunicado que: “La suspensión
de los ensayos es una acción rutinaria en este tipo de investigaciones. El
hecho de que una persona tenga esa dolencia no implica necesariamente que la
responsable sea la vacuna.”
Este revés
llega justo cuando consejeros delegados de las 9 compañías que lideran la búsqueda
de la vacuna contra el covid-19 publicaron un aviso conjunto. En este se
comprometen a no distribuir la vacuna contra el mortal virus hasta que se hayan
concluido satisfactoriamente todos los ensayos clínicos.
Lo único
cierto es que, aunque Oxford y AstraZeneca tengan este revés no significa que
otros laboratorios no lo vayan a tener. Además, la fabricación y distribución mundial
de una potencial vacuna solo podrá ver la luz hasta el año 2021 según la Organización
Mundial de la Salud.
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