Este miércoles hacia las 02: 00 pm en Washington D.C el congreso
estadounidense se disponía a sesionar para realizar el conteo final de los
votos electorales. Este proceso que siempre se hace de forma protocolaria para
confirmar la victoria del ganador, en este caso Joe Biden terminó sin comenzar
ya que los seguidores del presidente Trump ingresaron en gran número a la sede
del Capitolio.
Supremacistas
blancos, sobrepasaron la seguridad del Capitolio algunos de ellos portando
armas largas. Asaltaron a la policía, rompieron las barricadas, las ventanas y
se tomaron las instalaciones de Senado y Cámara de Representantes.
Elecciones
que fueron ganadas por el Demócrata Joe Biden el pasado 3 de noviembre. Pero a las que Trump se rehúsa a admitir su
derrota, aun cuando todas las pruebas muestran que no hubo fraude, incluso
miembros de su mismo partido el Republicano así lo han admitido.
Ante
estos hechos y el caos que se ha visto
las autoridades de la capital Washington han emitido el toque de queda. Solicitando
refuerzos de policía y de la Guardia Nacional, aunque este último solo puede
ser desplegado por orden presidencial y no del Gobernador según las Leyes de
Washington.
Pero
el caos en el interior del Capitolio empeoró a tal punto que varios
manifestantes se tomaron las oficinas de los senadores del Congreso. Incluso
forzaron la oficina de Nancy Peloci, Presidenta reelecta de la Cámara de
Representantes y contradictoria de Trump.
Por
suerte los Senadores de ambos partidos fueron evacuados junto a los periodistas
de la prensa acreditados en el Congreso. Mientras, que varios seguidores
rompieron los vidrios del Congreso para intentar entrar por lo que la policía
del edificio apunto sus armas contra la turba.
Dado
este caos e insurrección provocó disparos en el interior del edificio. En el
que una mujer recibió un disparo en el pecho al parecer por las fuerzas de
seguridad. Hasta este momento se sabe que está herida de gravedad y fue
traslada a un centro médico.
Otras
seis personas fueron detenidas por porte de armas sin permiso, ataque a
servidor público y posesión de municiones no registradas. Se calcula que al
menos unas 15 mil personas se tomaron el congreso a la fuerza.
Ante
semejante descontrol el presidente electo Joe Biden llamo a la calma y a
mantener la democracia. También, pidió a Donald Trump contener a sus
seguidores. Casi de inmediato el mismo Trump en una alocución pidió que todos
se fueran a sus casas en paz y tranquilos. No sin antes recordar que le habían robado
las elecciones.
Poco a
poco mientras anochecía en Washington y el toque de queda se hacía efectivo. Hacia
a las 06:00 pm hora local los manifestantes tomaron sus banderas y emprendieron
el camino a casa lentamente.
Dejando
atrás los estragos de las palabras incendiarias del presidente Donald Trump, en
la que hasta hace un tiempo Estados Unidos era el ejemplo para las democracias
del mundo.
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