Domingo
en la noche en los Estados Unidos y Suramérica, lunes en Myanmar, país asiático
conocido anteriormente como Birmania. Al otro lado del mundo las noticias no
son buenas, nadie podría prever que los repentinos cortes de energía, telefonía
y los bloqueos de la red de Internet eran el aviso de un golpe de estado en
progreso orquestado por el mismo Ejército de Myanmar.
La razón
los militares aducen un fraude electoral en las pasadas elecciones del mes de
noviembre. En las que el Partido Liga Nacional por la Democracia (LND), de la líder
Aung San Suu Kyi de 75 años y Premio Nobel de la Paz, logró la mayoría en el Parlamento.
Los
militares y sus adeptos justifican el golpe en el Articulo 417 de la Constitución
de 2008. Curiosamente redactada por los mismos hombres de camuflado que se han
tomado el país, que les faculta para tomar el control de la nación en tiempos
de emergencia nacional.
En
efecto, los militares han cumplido al pie de la letra este Articulo hecho a su
medida y a sus necesidades. Ya desde el pasado 26 de enero el portavoz del Ejército,
General, Zaw Min Tun había advertido que “tomaría medidas” sí la disputa de las
elecciones no se resolvía.
Amenaza
que no fue tomada en serio en una nación que fue sometida por la dictadura militar
entre 1962 y 2011. En esta reciente y fresca democracia que sólo ha permanecido
9 años los militares no respaldan el poder civil.
En las
primeras horas de la mañana de este lunes las fuerzas armadas no perdieron el
tiempo y con su fuerza intimidatoria se
tomaron las calles de Myanmar. En un mensaje transmitido por televisión declararon
el estado de emergencia por el término de un año.
Se
ordenaron arrestos a lideres del partido de gobierno, así como a sus familiares.
Lideres estudiantes y dirigentes étnicos, también se tomaron el control de la
cadena de televisión pública MRTV. Además, de la supuesta captura de la líder Suu
Kye la cara más reconocida internacionalmente en el gobierno en el cargo de
Consejera de Gobierno.
Aunque,
no hubo violencia, pero si intimidación los militares han puesto en el poder al
máximo jefe de las Fuerzas Militares. General, Ming Aung Hlaing quien tampoco
respalda el resultado de las elecciones.
De este modo la comunidad internacional ha reaccionado a favor del gobierno civil. Estados Unidos ha pedido la libertad de los detenidos, siendo esta la primera prueba del recién posesionado presidente Joe Biden.
De
otra parte, el Consejo de Seguridad de la ONU llamo para este martes una reunión
de emergencia. El tema principal como es obvio el golpe de estado en Myanmar. Reunión
que se efectuara por videoconferencia dadas las condiciones mundiales de la
covid-19.
Solo
el tiempo dirá, sí el golpe militar en Myanmar es una carrera de velocidad o
una maratón que tomara tiempo y que llego para quedarse. Mientras, el pueblo
pide a gritos el regreso de la democracia para su país.
Comentarios
Publicar un comentario