Las
protestas iniciaron a mediados de enero en la capital Ottawa, Canadá cuando un
grupo de camioneros decidieron cesar sus actividades. Esto en contra de las
medidas sanitarias del gobierno nacional de exigir la vacunación para quienes
cruzan la frontera de los Estados Unidos y Canadá con todo tipo mercancías y
suministros.
Los
transportadores binacionales han bloqueado carreteras y algunas ciudades se han
sumado al descontento. Ahora, son llamados el “Convoy de la Libertad” o
“Freedom Convoy” y ya han recibido el acompañamiento de personas distintas
al gremio transportador.
Dos
años después del brote de la pandemia global y cuando se tiene una cura parcial
para evitar las hospitalizaciones y las muertes. Los transportadores
canadienses están en contra del uso de la vacunación obligatoria, misma que
salva vidas.
Esto
no solo causa caos en provincias como: Alberta y Ontario, si no que ya ha
provocado escases de frutas, verduras y carnes que no han llegado a los grandes
supermercados. Generando un aumento en el precio de los alimentos y casi todo
Canadá.
Tal
es el descontento que no sólo se han bloqueado vías en las ciudades y carreteras.
Algunos grupos han escalado su ataque a vandalizar y profanar monumentos nacionales.
Algunos, también han atacado a la policía y lo más preocupante nunca antes
visto la aparición de banderas con símbolos nazis.
Debido
a esto la Real Policía Montada ya inició las investigaciones pertinentes.
Mientras, que el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau y familia debieron
abandonar su casa en Ottawa por motivos de seguridad.
Aunque,
estas protestas son raras en el país se sabe que el 90% los transportadores ya están
vacunados. Por lo que son sólo un pequeño grupo que ha puesto en jaque el gobierno
nacional.
Tanto
que, aumentaron los precios en alimentos, vehículos y sobre todo en la gasolina
de vital importancia para transportadores y ciudadanos.
Por
lo que la orden ejecutiva que había presentado el ministro Trudeau de ordenar un
periodo de cuarentena para los camioneros que cruzan la frontera ha quedado en
espera. Esto desde el pasado 15 de enero cuando también Estados Unidos había solicitado
la obligatoriedad de las pruebas de vacunación para cruzar la frontera.
Los
días pasan y los altos mandatarios de Canadá sólo esperan que los ánimos se
derritan como la fría nieve que hoy enfrenta el país debido el invierno.
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