Elecciones cabeza a cabeza
este domingo, para ascender al poder o retener la silla presidencial en Turquía.
En una disputada segunda vuelta, tras las primeras votaciones realizadas el
pasado 14 de mayo de 2023.
Tras las primeras votaciones e
incluso un terremoto de categoría 7,8 grados que golpeó Turquía; y que tambaleó
en el poder al actual presidente, Recep Taryp Erdogan. Esté logró acariciar la victoria
y mantenerse en el poder por 5 años más. Consiguiendo lo que pocos creían posible,
una reelección.
Debido a que Erdogan ya ha gobernado
el país por cerca de 20 años. De esta forma, Tras el conteo del 98% de los
votos, Taryp Erdogan, al frente del Partido de la Justicia y el
Desarrollo (AKP, islamoconservador), alcanza el 52,1% de los
sufragios, frente a un 47,9% para su rival, el socialdemócrata
Kemal Kiliçdaroglu de 74 años de edad.
Erdogan de 69 años no sucumbió
a las expectativas de cambio entre los votantes. Como ha sido la tendencia en
todos los países del mundo, sumergidos en la guerra intestina de la derecha y
la izquierda.
Además, Las elecciones se
consideraban una de las más importantes para Turquía, ya que la oposición creía
que tenía posibilidades de desbancar a Erdogan, cuya popularidad se había visto
afectada por la crisis del costo de la vida y la lenta respuesta al terremoto
que mató a más de 50.000 personas en el país.
En cambio, la victoria
reforzará la imagen de insuperable del presidente, tras haber cambiado ya la
política interior, económica, de seguridad y exterior de la nación de 85
millones de habitantes, miembro de la OTAN.
Por lo pronto, el viejo
conocido de la política turca ha retenido el apoyo de los votantes conservadores,
que le siguen siendo fiel a pesar de las dificultades. En tanto, que la
oposición ha denunciado irregularidades en las votaciones y agresiones físicas contra
los observadores electorales.
Lo cierto, es que el destino
de lo 85 millones de habitantes turcos ha sido elegido por los próximos 5 años.
Mismo que ya tenia sus reservas, pues Erdogan en los últimos años había eliminado
el sistema de gobierno parlamentario, abolió el cargo de primer ministro y
concentró mayor poder en el Ejecutivo, situación que le ha costado numerosas
críticas.
Pero, no las suficientes como
para ser removido de su cargo. Tanto que el mismo Erdogan se dirigió a una
plaza pública atiborra de sus votantes en la capital, Estambul donde agradeció
la confianza a sus seguidores, y abogo por la unidad nacional.
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