En
los últimos días una pequeña isla en Italia, Lampedusa ha recibido tantos
migrantes como habitantes tiene la isla. Desde el pasado jueves y hasta este
fin de semana se han contabilizado 10.000 migrantes todos provenientes de África.
Como
es usual migran de sus países de origen buscando un mejor futuro. Comida,
trabajo, mejor atención en salud son el común denominador entre los cansados
viajeros. Ya suman más de 100 las embarcaciones atestadas de ciudadanos
africanos que llegan a Lampedusa.
Siendo
este el primer territorio europeo cerca a las costas de Sicilia con las que se encuentran
los migrantes. Esto ha generado una crisis sin precedentes en años. Sumado a
que la isla solo cuenta con un centro de acogida primaria, que ya fue desbordado
generando hacinamiento.
Sin
hablar de las condiciones de deshidratación y destrucción con la que llegan los
migrantes; tras varias semanas en altamar. Los recursos para ayudarlos se agotan
y la paciencia de los locales también, aunque quieren ayudarlos ya sobrepasa
las capacidades para poder asistirlos.
La
entidad internacional encargada de distribuir o ofrecer ayudas en la isla es la
Cruz Roja. Que ha recibido en lo que va de 2023 123.860 migrantes y refugiados.
La mayoría llegan desde el norte
de África porque la posición geográfica de la isla permite un relativo
fácil acceso desde Túnez, a 250 kilómetros, y desde Líbano, a 290
kilómetros. Es su puerta a Europa. Quienes lo consiguen, lo celebran.
Pero la tensión con los vecinos aumenta.
De otra parte, la
presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y la primera
ministra italiana, Giorgia Meloni, aterrizaron este domingo a la pequeña
isla italiana de Lampedusa, a donde han llegado miles de migrantes esta semana,
reavivando el espinoso debate sobre el reparto de responsabilidades en la Unión
Europea.
Meloni, advirtió que la
emergencia migratoria pronto podría afectar a toda la UE: "Este
flujo masivo de inmigrantes al que nos enfrentamos es algo que requiere la
implicación y la responsabilidad de todos para luchar contra las salidas
ilegales; de lo contrario, las cifras de este fenómeno abrumarán primero a los
Estados fronterizos, pero luego a todos los demás".
A
lo que Úrsula Von Der Leyen respondió que Italia no esta sola y la Unión
Europea los acompañará con una política de 10 puntos entre
los que se encuentran la definición de corredores humanitarios legales y
seguros, una actualización de la legislación europea contra el tráfico de
personas y la activación de un mecanismo de solidaridad para agilizar el
reparto de los migrantes entre los 27 Estados miembros.
Se
busca frenar o reducir la migración, sin embargo, la ola de migrantes no se detendrá
por lo menos en el corto plazo. El número de migrantes aumentará dia a día y los
muertos entre ellos niños y mujeres embarazadas seguirá creciendo como la espuma.
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