Estados Unidos lanza un ataque aéreo contra milicias proiraníes en Irak y Siria.

Avión B1 lancer de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos/ Archivo Pentágono, EE. UU.

Cinco días después de que tropas estadounidenses recibieran un ataque con drones contra una base militar en la frontera de Jordania y Siria; desde el aire Washington ordeno una contundente respuesta este viernes. Tras el fallecimiento de tres soldados afroamericanos y cuarenta heridos en el ataque del pasado domingo.

Los fallecidos fueron identificados como los soldados de la Reserva del Ejército William Rivers, de 46 años, y Kennedy Sanders y Breonna Moffett, ambos de unos 20 años.

Esta ofensiva aérea contra grupos respaldados por Irán en Siria e Irak se da tras el ataque a la base militar en cuestión, conocida como Torre 22, una base de apoyo logístico y no de avanzada.

Según confirmó el Pentágono, la operación se realizó tanto con aviones tripulados como con drones e implicó cuatro rondas de incursiones en más de 85 sitios en la provincia oriental de Deir Ezzor en los que operaban militantes pro iraníes, como cuarteles generales de mando, control e Inteligencia, almacenes de municiones y otras instalaciones.

Los ataques aéreos emplearon más de 125 municiones de precisión” sobre objetivos pertenecientes a los combatientes “que facilitaron los ataques contra las fuerzas estadounidenses y de la coalición”, indicó en un comunicado el Mando Central de Estados Unidos.

Por otra parte, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y otros altos dirigentes estadounidenses llevaban días advirtiendo que Washington devolvería el golpe a las milicias. Hasta el momento se reportan varios fallecidos y heridos, según la televisión estatal Siria.

Todo esto mientras el presidente Joe Biden asistía a una ceremonia de homenaje y se reunía con familiares de los tres soldados que murieron en Jordania.  Esto en la base militar de la Fuerza Aérea en Dover, Delaware.

Entre las plataformas utilizadas en las operaciones de este viernes hubo bombarderos B-1 de la Fuerza Aérea, dijo a CNN un funcionario de defensa. El B-1 es un bombardero pesado de largo alcance que puede desplegar armas de precisión.

Por su parte, el secretario de Defensa, Lloyd Austin, dijo el jueves que la respuesta de Estados Unidos sería “de múltiples niveles”.

"Tenemos la capacidad de responder múltiples veces, dependiendo de cuál sea la situación", dijo en una conferencia de prensa en el Pentágono.

“Tienen mucha capacidad. Yo tengo mucha más”, añadió Austin, refiriéndose a los grupos respaldados por Irán.

Por lo que demostraría que este es solo un primer paso en la respuesta de los Estados Unidos por el ataque recibido el pasado fin de semana. Más ataques aéreos podrían ser efectuados en los siguientes días.

 

 

 

 

 

 

 

 

Comentarios