Un fuerte ruido despertó en la
madrugada de este martes a los habitantes de Baltimore, Maryland, en los Estados
Unidos. Un buque carguero con capacidad para transportar más de 10.000
contendedores y con un tamaño de 350 metros de largo, perdió el control y chocó
contra uno de los pilotes del emblemático puente Francis Scott Key, provocando
que se derrumbó por completo.
El puente construido e inaugurado
en 1977, y con una longitud de dos kilómetros y medio y cuatro carriles
vehiculares cayó como un castillo de naipes en cuestión de minutos. Por el
momento dos personas han sido rescatadas, una de ellas en estado grave, y seis
se encuentran desaparecidas. Aunque, era de madrugada ya presentaba tráfico
vehicular hacia las 01:28 AM hora local.
Las autoridades han declarado
el estado de emergencia mientras los equipos de rescate siguen rastreando la zona.
El carguero siniestrado es el Dali, de 300 metros de eslora, que tenía como
destino Sri Lanka.
El barco, que había llegado a
Estados Unidos procedente de China el pasado 13 de marzo, fue construido en
2015 y tiene bandera de Singapur. El Dali operaba una de las líneas de
navegación de la compañía danesa de transportes y logística Maersk.
A penas iniciaba su viaje de
27 días sin escalas que lo llevaría hasta Colombo, la capital de Sri Lanka,
donde debía llegar el próximo 22 de abril. Cuando se presentó el incidente sin precedentes
en la industria naviera.
En las últimas horas, la
Autoridad Marítima y Portuaria de Singapur (MPA) dio a conocer las causas del
accidente. Según el organismo, la embarcación, que a unos 30 minutos de zarpar
hacia Sri Lanka embistió contra el puente Francis Scott Key, habría
sufrido una “pérdida momentánea de propulsión” momentos antes
del accidente, que acabó en el colapso de la estructura y un incendio en el
barco.
También, mencionó que la nave
había arrojado sus anclas al agua tal como establece el procedimiento
de emergencia, en un intento por evitar el impacto, que coincide con el primer
reporte que indica que la tripulación informó de una pérdida de energía
momentos antes.
Por su parte, el presidente
estadounidense, Joe Biden declaro que: “Estoy dando instrucciones a mi
equipo para que mueva cielo y tierra para reabrir el puerto y reconstruir
el puente tan pronto como sea humanamente posible, pero esto va a llevar
algún tiempo”, dijo en un breve discurso desde la Casa Blanca.
De acuerdo con la información
que se tiene por el momento, “no existe absolutamente ningún indicio de
que esto sea terrorismo”, afirmó James Wallace, jefe de bomberos de
Baltimore; quien añadió que tampoco hay señales de que el accidente fuera
intencionado.
Esta información fue
corroborada tanto por el gobernador de Maryland, Wes Moore, como por el FBI.
Por ahora, se buscan nuevas
rutas y formas de cargue y descargue para evitar traumatismos económicos en el Puerto de
Baltimore.
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