Peregrinación mortal a La Meca en Arabia Saudita

Peregrinos musulmanes rodean la Kaaba, un edificio cúbico en la Gran Mezquita, durante el peregrinaje anual del haj en La Meca, Arabia Saudí, el 17 de junio de 2024. Via AP

Cada año millones de musulmanes realizan una larga peregrinación hacia Arabia Saudita desde países vecinos. Sin embargo, esta temporada ha sido particular, altas temperaturas han marcado el largo caminar de los feligreses. Tan solo este domingo se han presentado 1301 personas fallecidas por el calor abrasador y las grandes multitudes.

 El sábado, según datos recobrados por la agencia francesa AFP, fallecieron 1.100 peregrinos y el viernes 577 muertos, todos por las mismas circunstancias ya nombradas. Con una participación de 1.8 millones de personas, en su mayoría de musulmanes extranjeros.

Los rituales volvieron a celebrarse este año con temperaturas muy altas, que alcanzaron los 51,8 grados centígrados en la Gran Mezquita de La Meca, la ciudad más sagrada del islam, en el oeste de Arabia Saudita.

Cada año, decenas de miles de fieles intentan participar en la peregrinación sin disponer de los permisos necesarios, pagados y concedidos según cuotas y a altos precios, que dan acceso, en particular, a instalaciones climatizadas.

Ya que la tradición dicta que, al menos, una vez en la vida se debe visitar este lugar. La mayoría de los visitantes provenientes de Egipto, misma nacionalidad que ha sufrido el mayor número de fallecidos. Que se suman a países como: Indonesia, India, Jordania, Túnez, Marruecos, Argelia y Malasia.

Arabia Saudí ha invertido miles de millones de dólares en control de multitudes y medidas de seguridad para los que hacen el peregrinaje anual de cinco días, pero el enorme volumen de participantes hace que resulte difícil garantizar su seguridad.

El islam utiliza un calendario lunar, de modo que el haj se celebra unos 11 días antes cada año. Para 2029, el haj ocurrirá en abril y en los próximos años, después de eso caerá en invierno, cuando las temperaturas son más suaves.

Las contingencias que se presentan son normales cada año debido a las multitudes. En 2015, una estampida en Mina durante el haj mató a más de 2.400 peregrinos, el incidente más letal en el peregrinaje, según un conteo de la agencia de noticias AP. Arabia Saudí nunca ha reconocido la suma total de fallecidos. En otro incidente, ese año, una grúa se derrumbó en la Gran Mezquita de La Meca y mató a 111 personas.

El segundo incidente más letal en el haj fue una estampida que mató a 1.426 personas en 1990. Debido a estos hechos, Arabia Saudita exige que los visitantes compren licencias disponibles para acceder a la Meca. Quienes, no las tengan, no podrán ingresar en los distintos buses que cuentan con aire acondicionado.

Pero siempre hay personas que no tienen los permisos, y realizan el viaje de forma ilegal a pie exponiéndose a las altas temperaturas. Donde aquellos que tienen mejor suerte se desmayan y continúan su caminata mortal. Mientras que otros fallecen en su intento de llegar a La Meca.

Aunque las autoridades tratan de enviar un mensaje de tranquilidad a los visitantes. La temporada del hach está libre de brotes o amenazas a la salud pública, a pesar del gran número de peregrinos y los desafíos que plantean las altas temperaturas", dijo en un comunicado el ministro de Salud saudita, Fahad Al Jallayel.

Según los científicos, los años por venir serán peores. Ya que el calentamiento global agravara las condiciones a las que se ven expuestos los peregrinos. Una investigación sugiere que, con un aumento de 1,5 °C en la temperatura global por encima de los niveles preindustriales, el riesgo de sufrir un golpe de calor durante el hach podría aumentar cinco veces.

Que aquejarían a los visitantes que emprenden caminatas de hasta 15 kilómetros, sin beber agua y bajo el fuerte rayo de sol. Sin embargo, esto no hará que el próximo año millones de personas intenten lograr su viaje con éxito.


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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